Peter es expulsado de la escuela por copiar y robar, y su padre, que obsesionado por su trabajo no dispone del tiempo suficiente para enderezar su conducta, decide enviarlo con su tío Nels Oleson para que aprenda el sentido de los valores. Con los mimos constantes que recibe de la Sra. Oleson y la dificultad para adaptarse a su nueva vida, Nels decide que Charles es el mejor candidato para la tarea.