Charles y Mary viajan juntos a Chicago. Él para representar a Walnut Grove en la asamblea rural del Grange donde se deciden las normas estatales, y su hija para poder acompañar a su novio John al baile anual de la universidad. Sus respectivas ilusiones se desvanecen: por los mezquinos intereses partidistas que gobiernan la institución, y el amor ya no correspondido de Mary.