Cruz no puede olvidar el ostracismo que vivió durante la fiesta real, del que culpa directamente a su cuñada. Sin embargo, esta no ha puesto fin a su humillación hacia Cruz y le tendrá reservada una nueva jugada. La operación de Salvador es inminente y Catalina media para que le concedan un permiso a María Fernández y así pueda acompañarle. Jimena recibe la visita de su madre, cada vez más preocupada al comprobar que Jimena no ha seguido sus consejos para fingir un aborto que dé por terminado de una vez por todas a la farsa de su embarazo. Pía no oculta su desconfianza hacia Feliciano, al que prohíbe explícitamente acercarse a su hijo. Petra intenta dar apoyo a su hermano pero este le confiesa algo que sacará a la doncella personal de sus casillas. Candela recibirá una noticia que cambiará drásticamente no sólo su futuro, si no también su presente.