Raina Punjabi, una desarrolladora de juegos, lanza su primer videojuego en medio de una catarata de insultos, intimidación y amenazas de muerte hechos online por una comunidad de jugadores predominantemente machista. Cuando una empleada es atacada en una convención de jugadores, el detective Tutuola investiga el delito pero Raina se niega a retrasar el lanzamiento y la policía debe protegerla.