Tsurubishi sustituye al dueño de la cafetería Yamabushi y se dispone a hacer el arroz frito definitivo, así que parte en busca de los ingredientes perfectos. De noche, Niikura tiene un ataque de hambre y devora todo lo que pilla. Kuratake, el peluquero conocido como "el más malote de CITY", vende los regalos de sus parroquianos... con un propósito. En CITY, no hay luz sin su reverso de oscuridad.