Jana y Abel se van del convento con las manos vacías y sin saber si el bebé está allí. La desesperación empieza a cebarse con ellos y el servicio, pero la doncella aún se guarda un as bajo la manga. Don Antonio de Carvajal y Cifuentes anuncia que ya están tramitadas las invitaciones para los marqueses y su familia para la garden party organizada por el rey. Cruz revelará la noticia a su cuñada Margarita, a la cual no le hace ninguna gracia. Aunque peor lo tienen los hermanos, Alonso y Fernando, ya que esto supone un nuevo motivo de discusión. Catalina intenta mediar entre ellos, pero es inútil... Entre Salvador y Lope parece que la amistad empieza a resurgir de nuevo, pero veremos si la de Candela y Pía tiene aún esa posibilidad cuando la cocinera suba al fin a disculparse con su amiga por la desaparición de su bebé.