Seguir viviendo en Walnut Grove es imposible y sus habitantes buscan una vida mejor en otro lugar. Los Ingalls se mudan a Winoka donde, gracias a Adam, Charles encuentra trabajo como gerente y Caroline de cocinera en el mismo hotel, y en el que se alojarán con las niñas. Aquí también llegan la familia Garvey y los Oleson, con la dificultad que comporta para todos el cambio de vida de la ciudad.